Es muy curioso como nadie habla aún de lo curioso que fue este ataque en el que todavía siguen sin querer ver la realidad, la existencia de una familia artística, madrileño-aragonesa descendiente del siglo XIX. La historia puede ser por simple incompetencia, envida o dejadez, cual de ellas elegimos para que quieran esconder lo grande de esta saga, una SAGA de primera calidad.
Los nombres sorprenden a cualquiera por su talla todo un maestro de orquesta, director del teatro Real, maestro de voces y autor de zarzuela que intento llevar a lo más grande el gusto por la opera azarzuelandola, fundador de orfeones y educador de voces, decir José María Alvira es decir lo más grande de nuestra gran lírica durante los finales y comienzos del siglo XX.
Una actriz y empresaria dramática de primera calidad vanguardista, estrenos de su trayectoria lo recogen los más famosos periódicos del momento, sus trabajos cinematográficos con los mejores directores y artistas españoles dejan en evidencia que traten de ocultar que no era casualidad su labor sino el pertenecer a una gran familia del arte.
María del Carmen Alvira, la gran arpista y maestra de orquesta, a la que borraron también por envidia porque irrelevante no puede ser quien atesoraba más condecoraciones que ninguna otra persona de la saga, su música deleitó muchas cenas de estado, y actos públicos que levantaron el prestigio y la marca España hasta donde está merecía. Quieren dejarla como una desconocida porque no interesa que se conozca su existencia.
Tampoco aparecen en aquel momento en la saga los integrantes pequeños, Josefina Sánchez, Salvador y Manuel V. Sánchez, actores e hijos del gran actor y director Salvador Videgain, solo por ello ya merecía haber estado la saga, pero es que tenían que borrarla como borraron la de Videgain, la de los Povedano, García y alguna que otra destacadisima que surge por la prensa española sin parar, como se puede llamar Wikipedia la que borra a toda persona digna de darse a conocer.
La saga la formaban con página 4 personas ya que se estaba construyendo, ese cuarto al que le borraron la página y siguen sin querer ver por allí con su rotunda mezquindad en una enciclopedia en la que encuentras a cualquier mamarracho y cualquier delincuente o corrupto de la madre patria, es el odiado con avaricia por izquierdas y derechas sin que les halla echo nada el pobre de Juan José Videgain, el escritor innegable, el director artesano, el actor validísimo y muchas otras cosas más que solo por ello le dan el derecho de estar en una enciclopedía, cuantos españoles dedicados al arte conocen tantas facetas diferentes de esta profesión.
Cuatro personas que yo sepa de gente conocida son de sobra para considerarlos una saga, para quien tenga dudas hay dejó este 2017 el bueno de Juan José ese compendió de familia en Nosotros los artistas que deja claramente que no es baladí el llamar familia artística a esta silenciada.
Todavía se observan como el peloteo de las sagas se mantienen azmerreires como el futbolista del Barcelona o del basket de la saga Sagi, los adosados a la saga Bardem, la larga lista de los Larrañaga sin méritos, y cuantas sagas tienen colocaditos a esos parientes que no dan nada al arte. Parece ser que tendrá que bajar el cordero para que halla justicia en esta tierra como decía aquel villancico de Manolo Escobar, En esta tierra ya no queda caridad. Ni decencia diría yo, ya pagarán sus felonías ante el gran juez.
